Fernando Jiménez es responsable político de la Agrupación del PCE de Moralzarzal y militante de IU.

Tal como anunciaban los modelos meteorológicos estamos en plena ola de frio en nuestro país y eso supone que muchas familias españolas vayan a sufrir con más crudeza lo que se denomina pobreza energética.

Al mismo tiempo ayer por la tarde a los hogares españoles les costaba un 33% mas utilizar la luz eléctrica o esta misma semana subía el precio de la bombona de butano un 5 %.

Hace unas semanas conocíamos la triste noticia del fallecimiento de Rosa, una anciana de 81 años que falleció por un incendio provocado por una vela después de estar de dos meses sin suministro eléctrico por impago.

Todas conocemos casos de gente que sufre en estos meses, que hace lo imposible para intentar calentar la casa, que busca cualquier clase de invento para el frío no se les meta en sus huesos.

La crisis que sufre la clase trabajadora esta haciendo que en muchas ocasiones el calentar una vivienda es un verdadero lujo. Los datos son alarmantes, en 2014 el 11% de los hogares españoles (equivalente a 5,1 millones de personas) se declaraba incapaz de mantener su vivienda a una temperatura adecuada en los meses fríos o el 15% de los hogares españoles (equivalente a 6,2 millones de personas) destinaban más del 10% de sus ingresos anuales a la compra de energía para la vivienda. Desde 2012 la pobreza energética ha crecido en España un 22%.

Por ejemplo, en la Comunidad de Madrid más de 60.000 personas no pueden pagar las tarifas energéticas.

Sube la luz o sube la tarifa del gas (subió un 67% de 2014 a 2015) mientras la clase trabajadora ha perdido un 10% de capacidad adquisitiva.

La pobreza energética golpea de forma más dura en los hogares en los que la persona principal esta en paro, tiene un contrato temporal, proviene de un país de fuera de la UE o en el caso de las familias monoparentales.

Además existen estudios que relacionan la pobreza energética con la salud. Los cálculos de la tasa de mortalidad adicional de invierno (TMAI) actualizados al periodo 1996- 2014 indican que en España se produce un 20,3% más de muertes en invierno. de las cuales 7.100 (el 30%, según metodología de la Organización Mundial de la Salud) podrían estar asociadas a la pobreza energética más aya de enfermedades que pueden ocasionar a largo plazo o como puede afectar el frió en el hogar a los jóvenes que están estudiando.

Hace unas semanas a raíz de la muerte de Rosa, el PP y el PSOE anunciaron una ley para impedir que no se cortará la luz a ningún hogar por impago a las familias más vulnerables, casi un mes después seguimos sin tener conocimiento del desarrollo de esta ley.

En su momento cuando el PSOE y el PP iniciaron la privatización del sector eléctrico dijeron que tras esta medida se iba a producir “»una revolución eléctrica para bajar los precios y ganar competitividad» . Los hechos que estamos sufriendo nos alejan bastante de la realidad, han convertido lo que debería un derecho en un gran beneficio económico para las empresas privadas, de las que por cierto algunos políticos forman parte de sus consejos dentro de las puertas giratorias que hemos visto en los últimos años.

Desde el Partido Comunista se ha iniciado una campaña para reclamar la nacionalización de las empresas eléctricas, recuperar lo que fue nuestro y poner a este sector al servicio de la mayoría de la población en vez para recoger los miles de millones de beneficios a costa de exprimirnos.

Luchemos, organicémonos para luchar y recuperar lo que es nuestro.