Durante el pleno ordinario de marzo en Moralzarzal, el concejal delegado de Seguridad Ciudadana y Protección Civil, Borja Guillén García, de VOX, realizó unas declaraciones negacionistas sobre la violencia de género, generando una fuerte controversia.

Borja Guillén, quien además es tercer teniente de alcalde, es el responsable directo de la Policía Local de Moralzarzal por delegación del alcalde, José María Moreno (PP). Desde agosto de 2016, la Policía Local de Moralzarzal es la encargada de la vigilancia y protección de las víctimas de violencia de género en el municipio, en el marco del programa VioGen, firmado con el Ministerio del Interior.

El Sistema VioGen es una herramienta fundamental para el seguimiento y protección de las víctimas de violencia de género. Aglutina toda la información y documentación necesaria para que los cuerpos de seguridad sepan cómo actuar ante estos casos, con el objetivo de evaluar el riesgo de nuevas agresiones y proteger tanto a las mujeres como a sus hijos menores.

Desde Moralzarzal en Común (MeC) denuncian que es inaceptable que un concejal que niega la existencia de la violencia de género esté al frente de un cuerpo policial encargado de proteger a sus víctimas.

Explican que «la negación de una realidad ante la que este concejal tiene el deber de actuar pone en peligro a las mujeres. La Policía Local de Moralzarzal no puede tener al frente a un concejal como este. La ciudadanía de Moralzarzal no merece tener un responsable de seguridad negacionista de la violencia de género.»

Además, recuerdan que Borja Guillén ya fue objeto de polémica anteriormente por utilizar las redes sociales oficiales de la Policía Local de Moralzarzal para difundir bulos, insultos y mensajes de extrema derecha, lo que motivó que todos los grupos de la oposición pidieran su dimisión.

Ante esta situación, Moralzarzal en Común exige el cese inmediato de Borja Guillén García como concejal delegado de Seguridad Ciudadana y Protección Civil. . De no producirse este cese, consideran que la responsabilidad recae directamente sobre el alcalde, José María Moreno, hacia quien dirigirán sus peticiones de dimisión.

Asimismo, desde Maga Violeta han exigido también su dimisión a través de redes sociales o como mínimo que sea retirado de sus funciones en el protocolo VIOGEN.

Para Maga Violeta «su postura no solo deslegitima la lucha contra esta lacra social, sino que pone en riesgo la seguridad y los derechos de quienes sufren esa violencia».